Lección 1: «¡Ustedes pueden seguir saltando para desempatar!», les indicó el juez. «¿Si no el oro será para los dos?», preguntó el qatarí Mutaz Essa Barshim. El italiano, Gianmarco Tamberi, mira expectante y cuando el juez responde afirmativamente, ambos se abrazan victoriosos. Una lección para el mundo germinaba en ese instante: ¡y la de Tokyo 2020 no ha sido la única!
Años atrás, Gianmarco había sufrido una lesión que le impedía competir y fue el mismo Mutaz quien lo ayudó a superarla. La euforia y la solidaridad de estos dos atletas enseña que, por encima de tradiciones, paradigmas y dogmas, es posible compartir la gloria; claro, sin omitir las reglas, la ética y el honor. Y entonces cabe preguntarse: ¿cómo podría aplicarse esto en las organizaciones?
El dilema lo sufren las empresas en cuyos pasillos la que «se señorea» es la cultura de competencia interna. ¡Sí!, como en una «piñata de niños», se disputan los recursos que sobran. Las superan competidores que con esmero avivan la estrecha cooperación entre sus miembros.
Lección 2: Simon Biles, ganadora de más de 30 medallas en Juegos Olímpicos y campeonatos mundiales, súbitamente, sorprendió al mundo al comunicar que desistiría de participar en varias de las competencias en Tokyo 2020 para priorizar su salud mental. Su afirmación fue categórica: «No somos solo atletas. Somos personas, al fin y al cabo, y a veces hay que dar un paso atrás».
En los JJ. OO. de Río 2016, presencié a Djokovic y a J. M. del Potro disputar un memorable desafío. Al perder, Djokovich lloró; algo normal en grandes deportistas. En Tokyo declaró: «La presión es un privilegio… Si estás aspirando a ser de los mejores, debes aprender a lidiar con la presión…» Pese a ello, luego de volver a perder la lucha por una medalla, lanzó una raqueta y destruyó otra.
Biles y Djokovich nos recuerdan que, en situaciones límites, todos somos vulnerables. El autoconocimiento conduce a la toma de decisiones impostergables. La actitud valiente de Simon, de no negociar su salud integral, impulsa a las personas a reflexionar sobre cuándo detenerse, ¿lo incluye esto a usted? La de Djokovich, por su lado, ilustra que es de humanos contradecirse.
Lección 3: El venezolano Daniel Dhers y el costarricense Kenneth Tencio lograron su participación en la final de la competencia BMX freestyle. Siendo casi diez años mayor que el ciclista costarricense, Dhers es un mentor deportivo para él. Como verdaderos amigos, se ayudan para que cada uno entregue lo mejor de sí mismo en la competencia: ¡espíritu olímpico en acción!
En enero 2021, Dhers, el ganador de la medalla de plata en Tokyo 2020 y número uno de la Unión Ciclista Internacional, escribió en las redes sociales: «Me vine a Jacó, Costa Rica, por unos días, a rodar con mi bro, Kenneth Tencio, “pollis”». Como se suele decir, la humildad precede al honor.
Compartir el éxito con humildad y los fracasos con solidaridad, priorizar la salud mental, reconocer los límites para solicitar, dar y recibir apoyo: tres lecciones olímpicas que han sobresalido en Tokyo 2020. Cuando la fama, las expectativas y el egoísmo no imperan, se dejan huellas imborrables. Más allá de los podios temporales, se comparten honores trascendentes.